Ago 17, 2023

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Los políticos Carlos Pineda, Roberto Arzú y Thelma Cabrera pidieron a sus seguidores que votaran nulo, para manifestar su disgusto por la forma en que se llevó a cabo la elección general del 2023. Una vez quedó fuera de la competencia electoral, la ex candidata por el Movimiento para la Liberación de los Pueblos (MLP), Thelma Cabrera, lo sugirió a sus seguidores el 10 de mayo1. Poco tiempo después Carlos Pineda y Arzú se unieron a esa petición2. Pineda cambió de opinión un mes después, pero ya la inquietud se había regado entre el electorado3.

El artículo 237 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEPP)4 aclara que una papeleta electoral se considera nula si la intención del votante no está clara, o si no marcó una X, un círculo u otro signo comprensible. También anula su voto quien revela su nombre o quien emite su voto en una mesa que no le corresponde.  Si una bolsa llena de votos ha sido adulterada o dañada, también se declara nula la votación en esa Junta Receptora.  Los votantes que dejan la papeleta en blanco no emiten un voto nulo; los votos en blanco se cuentan aparte, y no alteran los resultados de la elección.  Los empadronados que se abstienen de votar tampoco votan nulo y tampoco inciden sobre los resultados finales.

Quizás los tres candidatos presidenciales excluidos de la competencia pensaban que el descontento ciudadano era lo suficientemente elevado como para rendir una mayoría absoluta de votos nulos, con lo cual el TSE tendría que repetir la elección.  Esperaban poder participar en esa ronda alterna.  Y es que la reforma a la LEPP dice así: “Artículo 203 Bis. Efectos de la mayoría absoluta de votos nulos. Si en los sistemas de votación, los votos nulos sumados en alguno de dicho sistema fueren más de la mitad de los votos válidamente emitidos, el Tribunal Supremo Electoral acordará y declarará en única instancia la nulidad de las elecciones en donde corresponda y se repetirán éstas, por única vez, debiendo los partidos políticos y en su caso los comités cívicos electorales, postular candidatos a los cargos públicos correspondientes. Para el efecto se procederá en lo aplicable de acuerdo con el artículo 210 de esta Ley.” 

Esta reforma electoral es reciente y se presta a distintas interpretaciones.  Una opinión dominante es que, en caso una mayoría absoluta de votantes anulara su voto, el TSE debe repetir la elección, ya sea para presidente, alcalde municipal, diputado distrital, la lista nacional o al Parlamento Centroamericano (PARLACEN), con los mismos candidatos que compitieron en la primera ronda electoral.  Una repetición de esta naturaleza no necesariamente habría dado cabida a los excluidos del proceso y habría significado un gasto adicional para el TSE.  Se mantiene, además, que el artículo 203 bis no aplica a la segunda ronda en la que votamos entre los dos finalistas a presidente5.

El voto nulo ganó la elección en términos de pluralidad de votos.  Nunca antes tantas personas habían optado por anular sus papeletas para la elección del presidente y vicepresidente.  En el 2019, 4.16% de los votos emitidos fueron nulos, y en el 2015, fueron únicamente 1.71%.

Sin embargo, la pluralidad está lejos del requisito de la mitad más uno. Tal meta es excesivamente ambiciosa. Desde antes de acudir a las urnas en junio, los guatemaltecos sabíamos que las probabilidades de que ocurriera eran reducidas. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) reportó la inscripción de 30 partidos políticos cuando convocaron a los comicios. Compitieron en las elecciones presidenciales 22 binomios. Cuando existen tantas opciones disponibles al elector, ser preferido por más de la mitad del electorado es complicado, pues cada candidato tiene sus simpatizantes, y consecuentemente el voto total se fracciona en muchas pequeñas tajadas del pastel.

La siguiente tabla muestra los resultados reportados:

Tabla 1: Resultados para Nulo, UNE y Semilla en la primera vuelta

(25 de junio, 2023)

Fuente: TSE según reporta Wikipedia, https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_Guatemala_de_2023

¿Cuántas personas tendrían que haber votado nulo para forzar al TSE a repetir la primera vuelta de la elección presidencial? Depende de qué dato tomamos, pero sobre la base del total de los votos válidos emitidos, nulo tendrían que sumar por lo menos 2,106,230 votos; y sobre el total de votos emitidos, se requerirían 2,782,800 votos nulos.  Ambos montos superan por mucho los 964,775 que efectivamente recibió el voto nulo.

¿Qué ocurrió en la elección para diputados ante el Parlamento Centroamericano (Parlacén)?  Existe una tradición popular a favor de anular el voto para la integración de este parlamento regional. Este año, anularon dicha papeleta 1,206,773 votantes, o un 21.74% del total de votos válidamente emitidos (5,548,558).  Como ahora, en el 2019 ganó el nulo en esta contienda, pues en esa oportunidad, el 20.61% de los votantes anularon su voto para el Parlacén.  El voto nulo aventaja significativamente a cualquier otro partido que compitió en esta elección, pero aún así, no es suficiente para requerir que se repita la elección6.   Más personas anularon su voto para el Parlacén que para la carrera presidencial. Pese al reiterado acto de protesta de un buen porcentaje de guatemaltecos, elección tras elección, diputados guatemaltecos electos toman sus lugares dentro del Parlacén.

¿Y qué pasa cuando los votos nulos no obtienen una mayoría absoluta? Los votos nulos pasan a formar parte de los votos no válidos, junto con los votos en blanco. No tienen impacto alguno en la designación de los cargos públicos. Para efectos prácticos, es como si los que quisieron patentizar su hastío con el estado de nuestra democracia, se hubieran quedado en casa rascándose el ombligo.  La apatía del abstencionista se confunde con la protesta de quien tiene opiniones políticas fuertes. Tristemente, la clase política puede desoír nuestro malestar. 

Por otra parte, gracias al cuantioso voto nulo, Guatemala celebra una segunda vuelta entre dos candidatos de izquierda que no reflejan las preferencias políticas de la gran mayoría de ciudadanos.  La encuesta que realizó la empresa CID-Gallup para la Fundación Libertad y Desarrollo nos muestra que un 76% de los guatemaltecos considera que el país va por el rumbo equivocado y el 73% considera que la democracia está en riesgo.  Al preguntarles a los encuestados cuáles eran sus inclinaciones políticas, es decir, su ideología, solamente un 4% afirmó ser de izquierda y un 2% se identificó como centro-izquierda; 28% dijo ser de derecha,  28% dijo no creer nada y un 25% dijo que no sabía cuál era su ideología7. ¿Cuántos de los votantes con preferencias centro-derecha habrán votado nulo, en vez de seleccionar a uno de los binomios con plataformas más de su agrado?

El siguiente es un ejercicio ficticio.  Malaguate es una comunidad de 9 votantes. Celebran una elección en la cual compiten, en primera vuelta, los candidatos Izquierda, Centro 1, Centro 2 y Derecha.  A medio proceso, su tribunal electoral saca de la contienda a Centro 1, por lo cual empieza un movimiento favorable al voto nulo.  A continuación podemos ver cómo se ordenan las preferencias de los votantes y tres distintos escenarios de votación. 

Tabla 2: Orden de preferencia de los candidatos para los 9 votantes

Tabla 3: Votos emitidos por cada partido en tres diferentes escenarios

En el escenario 1 pasarían a segunda vuelta Centro 1 y Derecha, en un empate de 3 contra 3.  En el escenario 2, pasarían a segunda vuelta Centro 2 (4 votos) y Derecha (3 votos). Centro 2 absorbió los votos de Centro 1 porque su plataforma es parecida a la del candidato ausente en la contienda. En el escenario 3, voto nulo empata con derecha, pero dado que no obtiene el mínimo de 5 votos requeridos en ley para obligar a la autoridad electoral a repetir la elección, la segunda vuelta se disputará entre Izquierda (2 votos) y Derecha (3 votos).  Así vemos cómo la población de Malaguate enfrentará una segunda vuelta sorpresiva.  Incluso se predice la victoria de izquierda porque algunos de los votantes con preferencias centristas se decantarán por Izquierda en vez de por Derecha.  Así, una sociedad centro-derechista va a parar con un gobernante radical. 

Los tres ciudadanos que votaron nulo en el escenario 3, en efecto, callaron. Se ausentaron. Otorgaron.  A la hora de sumar los resultados en este último escenario, fueron 6 los votos que determinaron el resultado.   Y a pesar de haber decidido no influir en el resultado, tendrán que soportar el gobierno del candidato electo.

Aun sabiendo lo anterior, muchas personas se están planteando la pregunta: ¿y si voto nulo en la segunda vuelta?  Sabemos que, en esta ronda, el TSE no repetirá la elección. A partir del 14 de enero nos gobernará Semilla o la UNE, durante los próximos 4 años, incluso si el 90% del electorado votara nulo.  Si voto nulo saca 90% del voto, la UNE saca 4% y Semilla 6%, entonces el TSE anunciará que Semilla accederá a la presidencia con una aprobación del 60% de los votos válidos.

Quienes se plantean el voto nulo en esta encrucijada sienten un fuerte desagrado por las dos opciones. Consideran que ambas opciones encarnan lo que está mal con la política, y que al abstenerse de votar ponen de manifiesto su rechazo a la corrupción. Comparan las alternativas reales que les presenta la oferta política con un ideal hipotético, un candidato virtuoso y competente, que no existe. A algunos de ellos se les olvida que en la primera vuelta se encararon con una papeleta con más de 20 binomios posibles, ninguno de las cuales era perfecto o puro, y marcaron su X en una casilla. Es enteramente comprensible que las personas virtuosas tengan dificultad en votar por alguien que, a su entender, es mucho peor que la alternativa que preferían en la primera ronda, y quizás, que representa todo lo que ellos rechazan.  Un amigo me dijo que es como votar con la mano ensangrentada. Hay algo en nuestro interior que se rebela en contra de este inesperado dilema que enfrentamos.  

Los que quieren votar nulo son buenas personas que quieren gritar a la clase política: paren este tren, me quiero bajar, esto no va conmigo, no quiero nada que ver son sus juegos sucios, sus decepciones, sus promesas falsas, la política no me gusta, no me quiero manchar, y más.  Pero como el voto nulo no sumará, sus gritos no resonarán. Votar nulo en la segunda vuelta sigue siendo una movida en la cual deliberadamente nos ausentamos del foro político y hacemos las del avestruz.  Voluntariamente nos volvemos mudos e indiferentes.  Pasada la elección podríamos afirmar «yo no voté por él o por ella», y lavarnos las manos de los desastres que vendrán, como Poncio Pilato. 

Si tenemos la impresión de que da igual un partido que el otro, es decir, que la UNE y Semilla harán un gobierno parecido, y con los mismos resultados, podríamos dejar la decisión en manos de otros. Nuestra indiferencia estaría basada en nuestra apreciación de lo que ofrecen las dos alternativas.  Si, por el contrario, creemos que existen diferencias importantes entre un partido y el otro, y que uno de los dos hará menos daño al país que el otro, entonces votar nulo es un escape poco realista y una victoria pírrica.  Eventualmente, en nuestro corazón podríamos llegar a escuchar otra vocecita, menos agradable: «entregué a mi país».

1 Dulce Rivera, «MLP llama a votar nulo en elección presidencial tras quedar fuera», Soy 502, 10 de mayo del 2023, recuperado de https://www.soy502.com/articulo/mlp-llama-al-voto-nulo-eleccion-presidencial-101567-0

Esdras Paz, «Ya fuera de las elecciones, Carlos Pineda hace llamado por el voto nulo», La Hora.gt, 26 de mayo, 2023, recuperado de https://lahora.gt/nacionales/elazgalo/2023/05/26/ya-fuera-de-las-elecciones-carlos-pineda-hace-llamado-por-el-voto-nulo/ y sin autor, «Roberto Arzú se une al llamado a votar nulo, fiscal de Podemos ve opción como imposible», Canal Antigua, 30 de mayo, 2023, recuperado de https://canalantigua.tv/2023/05/30/roberto-arzu-se-une-al-llamado-a-votar-nulo-fiscal-de-podemos-ve-opcion-como-imposible/

3 Verónica Gamboa, «Carlos Pineda cambia la estrategia y ya no pide voto nulo», Soy 502, 10 de junio, 2023, recuperado de https://www.soy502.com/articulo/carlos-pineda-cambia-estrategia-ya-no-pide-voto-nulo-50172

4  Ver la versión electrónica de la ley en https://www.tse.org.gt/images/LEPP.pdf

Ana Lucía Ola, «Qué es el voto nulo o blanco: ¿Qué pasa si esta opción es la más votada en las Elecciones 2023 en Guatemala?», Prensa Libre, 24 de mayo, 2023, recuperado de https://www.prensalibre.com/guatemala/elecciones-generales-guatemala-2023/voto-nulo-o-en-blanco-que-pasa-si-esta-opcion-es-la-mas-votada-en-las-elecciones-2023-en-guatemala/

Carlos Manoel Álvarez, «Parlacén: Y el ganador es…el voto nulo», Prensa Libre, 21 de junio, 2019, recuperado de https://www.prensalibre.com/guatemala/politica/parlacen-y-el-ganador-es-el-voto-nulo/. Los datos para el 2023 aparecen en https://trep.gt/#!/tc5/ENT.

Ver la encuesta aquí: https://www.fundacionlibertad.com/sites/default/files/fld_informe_encuesta_v4-2a.pdf 

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