Empezaron en cómics, luego los llevaron a la pantalla chica a través de series y recientemente han arrasado en películas que atraen la atención mundial; los superhéroes han estado plasmados en la cultura pop desde hace mucho tiempo. En la actualidad, las películas de Marvel y DC Comics nos han abierto las puertas a muchas historias con mensajes éticos importantes. Los superhéroes representan súper hombres y súper mujeres con poderes o fuerza que ningún ser humano tiene. Parecen estar muy lejos de una persona común y corriente. No obstante, si analizamos las actuaciones de los superhéroes nos damos cuenta de que no son tan diferentes a nosotros; en realidad, enfrentan dilemas éticos o retos personales como cualquier otra persona.
Todos nos topamos con dilemas éticos cuando estamos frente a una situación en la cual debemos difícilmente elegir entre dos opciones correctas. Rushworth M. Kidder llama estas opciones «bueno-versus-bueno» mientras que las opciones «bueno-versus-malo» son tentaciones morales, en las cuales a veces resulta fácil tomar la opción mala. Los superhéroes, sin embargo, se enfrentan mayormente con dilemas éticos como: salvar a una sola persona o a una ciudad entera; mantener escondida su identidad para tener privacidad o estar pendiente siempre de cuidar a los demás; crear tecnología cada vez más inteligente o evitar que el uso de esa tecnología lleve al mundo a la destrucción; entre otros. Si prestamos atención a las películas de superhéroes, vemos un patrón constante: estos personajes se comportan de manera muy humana a pesar de ser diferentes a nosotros en otros aspectos. Al final del día tienen que tomar decisiones difíciles que, a diferencia de las nuestras, afectan al mundo entero.
La ética como tema en las historias de superhéroes también toca otro punto interesante sobre una interrogante que siempre genera mucho debate: si el fin justifica los medios, ¿estará bien destrozar una ciudad entera durante una pelea contra el villano?, ¿es necesario matar al villano una vez termina la pelea o pasarse por encima de todas las leyes y desafiar a las autoridades que son las que deberían de proteger a la ciudadanía? Muchos dirán que el fin sí justifica los medios si el fin es bueno; por lo tanto, es estratégico utilizar algunos medios malos para obtener un fin deseable y «bueno». Sin embargo, la ética no es una estrategia y no debería serlo porque si la vemos como tal entonces cualquier acción, por mala que fuera, sería válida para alcanzar nuestros objetivos; no habría límites. Tomemos al personaje de Marvel, Thanos, como ejemplo. Este villano es catalogado como tal porque decide que lo mejor es hacer desaparecer a la mitad de la población de todo el universo para frenar la sobrepoblación y el sobreuso de diferentes recursos. Él reconoce un problema universal que podría llevar a que todo ser vivo en el universo tenga una vida miserable o que las especies eventualmente desaparezcan. No obstante, su método para alcanzar un fin deseable como el buen uso de los recursos no fue correcto ni ético porque hizo desaparecer a personas inocentes que merecían vivir. De haber tomado otras acciones para alcanzar su objetivo, podría ser que viéramos a Thanos como un héroe y no un villano.
Ahora bien, los superhéroes que pelean contra Thanos también deben decidir entre muchos medios para obtener su fin, que es casi siempre salvar a la humanidad. Esto nos deja dos lecciones importantes. Primero, cuando toman decisiones, los superhéroes también están motivados por razones personales que demuestran su lado humano y los valores que los forman. Esto pone en evidencia que nunca debe ser motivo de vergüenza apegarse a los valores propios a pesar de que alguien más no los comparta. Además, nos demuestran que siempre vale la pena luchar por la libertad y que nunca hay que darla por sentado. Segundo, si queremos vivir en una sociedad libre, entonces debemos dejar que las personas lo sean y no tratar de tomar decisiones por ellos (como lo que quiso hacer Thanos para «salvar» al universo de su perdición). El Capitán América o Supermán toman decisiones difíciles, pero nunca los vemos tratando de quitar lo que hace humanos a las personas y eso es su libertad. Por extraño que parezca, incluso en los cómics y películas de superhéroes podemos encontrar mensajes éticos y a favor de la libertad.