El Día de Todos los Santos

por | Blog Fe y Libertad

Nov 1, 2024

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El Día de Todos los Santos es una festividad solemne en la Iglesia católica, establecida por el papa Gregorio III el primero de noviembre. La Iglesia anglicana también la celebra ese día. Se cree que la elección de la fecha se debió a que coincidía con una festividad de los pueblos germanos, pues, en aquellos años, el objetivo de la Iglesia era eliminar las celebraciones paganas. En la Iglesia ortodoxa, luterana, metodista y en las católicas de rito bizantino, la festividad se celebra el primer domingo después de Pentecostés.

Es una fiesta en la que se honra y recuerda a todos los santos y mártires de la Iglesia cristiana. Esta fecha es especialmente significativa en muchas culturas, donde se rinde tributo a aquellos que han fallecido, reflejando un profundo sentido de conexión entre la vida y la muerte.

El Día de Todos los Santos tiene sus raíces en la tradición cristiana. Su origen se remonta al siglo IV, cuando comenzó a celebrarse en diversas partes del mundo cristiano. La festividad busca reconocer no solo a los santos canonizados, sino también a aquellos que han llevado una vida de fe, aunque no sean oficialmente reconocidos.

La mayoría de los países celebran tradiciones en este día, y muchos de ellos comparten la costumbre de visitar a sus seres queridos fallecidos y de adornar sus tumbas. Para la Iglesia católica, es un día de precepto, lo que significa que es obligatorio asistir a misa.

Algunos países agrupan estos tres días secuenciales: el 31 de octubre, celebración de Halloween (Víspera de Todos los Santos); el 1 de noviembre, Día de Todos los Santos; y el 2 de noviembre, Día de los Fieles Difuntos. A menudo se les llama «triduo de Halloween». Aunque este no es un término oficial, se refiere a estos tres días que están interconectados culturalmente. Cada uno tiene su propio significado y tradición, pero juntos marcan un período de conmemoración de los muertos y la conexión con lo sobrenatural.

Siendo Guatemala un país arraigado en la tradición y espiritualidad, el primero de noviembre se festeja con devoción. Este día es una amalgama de influencias ancestrales mayas y la religión católica, que se asocian para homenajear a nuestros seres queridos que ya no están con nosotros de manera única. Se puede decir que se celebra la vida y la memoria de aquellos que se nos adelantaron.

El Día de Todos los Santos simboliza la esperanza y la vida eterna. En muchas culturas, se encienden velas en honor a los fallecidos, iluminando el camino para sus almas. La mayoría de los guatemaltecos visita a sus difuntos; les llevan flores y adornos para decorar los mausoleos. Los platillos tradicionales de ese día son el fiambre, un plato de embutidos, carnes, verduras y condimentos. El ayote en dulce, los jocotes en dulce y los garbanzos en miel son postres tradicionales que acompañan al fiambre.

No se puede pasar el primero de noviembre sin los barriletes. Muy coloridos, son hechos a mano con papel, varas y en distintas formas. Se dice que son elevados al cielo para espantar a los espíritus malignos que invaden los cementerios y molestan a las ánimas buenas que allí descansan. Otros creen que se elevan como una señal de comunicación con los espíritus de nuestros antepasados. Esto se observa especialmente en los municipios de Sumpango, Sacatepéquez y Santiago Sacatepéquez.

En Todos Santos Cuchumatán, Huehuetenango, es día de fiesta. La comunidad se viste con trajes tradicionales y realiza rituales en honor a sus difuntos, y festejan el día con la carrera de cinta, una actividad muy esperada por los habitantes de Todos Santos y de Huehuetenango. La carrera dura doce horas y se lleva a cabo en una calle de tierra que conduce al cementerio. Durante ese tiempo, los jinetes recorren el trayecto repetidamente, y los caballos se desplazan a gran velocidad. Los jinetes visten el traje ceremonial de Todos Santos; esta indumentaria no solo es un signo de la riqueza cultural de la región, sino también una conmemoración de la importancia de mantener vivas las tradiciones que han pasado de generación en generación. 

La diferencia entre la celebración del Día de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos (fecha que se celebra en México) es que en este día, 2 de noviembre, se festeja a todos los que han fallecido (fieles difuntos), pero que aún no pueden gozar de la presencia de Dios, ya que se encuentran en el purgatorio.

El Día de Todos los Santos es una oportunidad para reflexionar sobre la vida, la muerte y la memoria. A través de diversas tradiciones y costumbres, se celebra el legado de aquellos que han influido en nuestras vidas, recordándonos la importancia de honrar su memoria.

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